Un sueño hecho realidad

A veces, los sueños se hacen realidad.
Este sábado, en Vista Alegre, hay un gran sueño que se hará realidad.
Hacemos una fiesta para celebrar el fin de las obras del Nuevo Local Social de Vista Alegre, situado en el Parc del Nord. Local con más de 200 mt2 divididos en 3 salas polivalentes, un despacho de juntas, un almacén, el hall, los servicios y una parte exterior cubierta por la pérgola de cobre. Y delante, tres pequeñas esplanadas para actividades.
Un local mucho más grande que el actual, moderno, preparado, integrado en el espacio que le rodea, hecho tal y como han querido nuestros queridos Piratas. O sea, todo un lujo.
Lujo que necesitábamos, lujo por el cual hemos luchado los últimos años la Junta actual, pero también un lujo por el que han luchado aquellos dirigentes históricos de la Asociación de Vecinos y que, con el paso de los años, han dado paso a gente más joven.
No quiero olvidarme en estos momentos tan especiales de amigos como Rafael Cava, Florentino Carro, Alejandro Iglesias, Alfredo Rodrigo, Herminio Holguín, Marcial Serrano López… Gente que ha luchado por el barrio desde sus inicios, que consiguió que se asfaltaran las calles, que se pusiera alumbrado público, calles con alcantarillado, parques dignos, una de las primeras Fiestas de Barrio de la ciudad…el lujo fue que Vista Alegre pudiera contar con ellos en años muy muy difíciles. Gracias a todos.
Y gracias también a toda la gente que luchó en la Comisión del PEMU (Laura, Baldo, Antonio, Mercedes, Francisco, Paco, Carmen, Jose, Esperanza, Juani, Encarna y Ma Ángeles –qepd-) por mantener no las casas del barrio, no el urbanismo del barrio, no por nada material, si no que lucharon por mantener el espíritu del barrio, el querer seguir siendo un pueblo, el poder seguir jugando los niños en la calle con tranquilidad, el conocerse todo el mundo, el callejear, el ir todos a una… y lo consiguieron, vaya si lo consiguieron!
Y, pos supuesto, a los miembros de la junta actual. A Manolo, a Marcialín, a Carmen, a Enrique, a Mamen, a Judi, a Marcial, a Toni, a Jose, a Quico y, como no, a Susana e Irene. A todos ellos que me han acompañado estos últimos años en los buenos momentos y en los malos, en el fin de semana de la Fiesta del barrio y en las reuniones de los lunes de enero por la noche, haciendo que el jugar la liga de barrio sea tan importante y en muchos casos igual de dificultosa que el jugar otras ligas que algunos creen indefectiblemente de mayor calibre pecando de ignorancia mayúscula. Inconscientes. Son el grupo que ha conseguido que, en los últimos años se consiguiera, por ejemplo:
o Pasar de 78 a 281 socios (los socios no son nominales, si no que lo es la familia)
o Que la fiesta triplicara su presupuesto y renovara casi todas las actividades
o Mantener el equilibrio para la financiación de la fiesta en los tres tercios de recursos propios, subvenciones, patrocinadores.
o Crear y asentar la Festa de la Tardor, de la cual ya se llevan 5 ediciones.
o Organizar la Calçotada, y ya van 3!
o Asumir el reto de preparar, organizar y celebrar el XXV Aniversario de la Fiesta Popular
o Solucionar los problemas recibidos de los socios y de los vecinos y vecinas en general con una media de 73 al año. Desde el espejo roto al container mal puesto a los ruidos del vecino, al banco que hay que poner o quitar, pasos de cebra elevados…
o Hacer del barrio Zona 30 parar que los coches no sobrepasen esa velocidad dentro del mismo.
o Consecución de la Pista Polivalent del Parc del Nord
o Restablecer las relaciones con la Comisión del PEMU e ir de la mano para solucionar el problema.
o Restablecer las relaciones con el CEIP Vista Alegre para trabajar conjuntamente
o Restablecer las relaciones con la FAVM para intercambiar experiencias con otras Asociaciones de Vecinos y trabajar conjuntamente con ellas.
o Última fase de arregle del Parc del Nord
o Creación de la Comisión de Fiestas, pasando de 8 personas en el 2001 a las casi 70 del 2006.
o Pasar de 21 actividades de la Fiesta del 1998 a las 72 de la Fiesta del 2006.
o Creación del Grup d’Esplai “Los Piratas” (gracias a Soraya y Gloria), que pasaron de 9 niños el primer año a los casi 60 del actual y con lista de espera que se podrá reducir con la inauguración del nuevo local.

La verdad, jamás me había puesto a pensar en la cantidad de cosas que hemos hecho.

En estos momentos es cuando te das cuenta que ha valido la pena el trabajo.

Y, sobretodo, la faena bien hecha y en equipo.

Las individualidades, en el mundo vecinal, no tienen futuro.